miércoles, 13 de marzo de 2013

Una calita. Una sonrisa.


Un viaje inesperado,
¡coge tus cosas que nos vamos!
Te asustas, lo piensas,
reflexionas, lo asimilas.
Cuando te  das cuenta
 ya te has marchado.

Si no sabes el destino,
viajas ciegamente.
Confías ciegamente.
¿Donde dormimos?
¿Debajo de un puente?
Será bueno, si es contigo.

Hemos llegado.

Entonces te das cuenta.
Das un vuelco a tu cabeza.
Olvidas tu vida.
Te pierdes tras esas colinas.
Y ya esta. No hay nada más.
Solo tú, ella y la mar.







sábado, 9 de marzo de 2013

Pequeños mensajeros de vida

Alguien dijo una vez, que si estos pequeños insectos, molestos para muchas personas, sobretodo en verano, desparecieran del planeta, desaparecería toda la vida sobre la Tierra.
¿Cómo algo tan diminuto, puede tener tanta importancia para algo tan grande como es un planeta?
¿Cómo un ser vivo, que según el ser humano, ni siquiera sabe o es consciente de cual es su función en el gran circulo de la vida, puede tener tanta relevancia en él?
Para ellas, su única función es recoger su preciado oro, algo parecido a lo que hace el ser humano con los recursos del planeta. Pero en cambio, lo que hacen estos insectos es un beneficio para el ecosistema y el planeta, no una catástrofe como pasa cuando el ser humano obtiene los recursos que desea o necesita.
¿Por qué el ser humano no puede recoger sus sueños y deseos de una forma parecida a la que lo hacen estos insectos?
Difícil cuestión, cuando tenemos en cuenta que la humanidad le da mas importancia a un ser vivo con un ''cerebro mayor'' o una ''inteligencia mayor'' y sin embargo, unos pequeños seres vivos, bastante más diminutos que nuestro cerebro, desarrollan sistemas de recogida de recursos mucho mas sostenibles que los nuestros. No solo sostenibles, sino beneficiosos para el planeta y para todos los seres vivos (que nos incluye a nosotros)
No será tan importante entonces el tamaño del cerebro, o la inteligencia, sino ser vivos en sí mismos.